Revelación




Hola.

Hoy me desperté con una mala sensación, no quiero hacer una carta que suene bien, intento ser honesta, lo seré. Creó que he sido cruel contigo aplicando el silencio como respuesta, sin proponermelo, lidiando con la frustración que me provoca este status, siento ganas de vivir muy lejos, y por otra parte la necesidad de no abandonarte.

Creo que he malentendido tu pesar, por llamarlo de una manera, si creí que se asemejaba a lo que le sucedía a David, hoy siento que se parece mas a mi propio pesar, todos tenemos una pena adentro, penita, o mas grande, y en la medida en la que he ido sintiendo que nos parecemos es que me va horadando.

Te quiero, si te quiero, mas allá de está relación, a esa personita, que parece muy lejos, al fondo de un alguien que la castiga constantemente, el dolor parece no tener recipiente, ¿no es cierto? En este tiempo de contacto amoroso, amoroso de pareja quiero decir, tengo un conocimiento que no puedo olvidar, eso que presiento de ti, como si mereciera la pena desnudarte verdaramente y ver algo nunca antes visto, en una naturaleza sin categorias, ni filias, ni pasión, y si no hay nada será como antes, como otras veces, ya lo hemos hablado, y me repito que estoy dispuesta a la decepción.

Cómo decirlo, el día que me encontré a mi amiga que ahora es mamá dijo que sentía una "dulce esclavitud" o algo así. Me desgarra alejarme, y entonces pido más tiempo.
Sufrir tal vez premia con una revelación, o un camino de cierto conocimiento, yo no lo sé, no tengo fuerzas para sostenerme en el sufrimiento.

Curiosamente, necesite de tu silencio para poder sentir con un poco de relieve y no en ese plano llano que es el rencor.

Ana



• • •